La audiencia vuelve a acompañar a Supervivientes que registra un 16,8 de share
La audiencia vuelve a acompañar a Supervivientes, que ha arrancado con fuerza, como pudimos comprobar ayer. No han dejado de ocurrir dramas desde que vino a Kiko Jiménez y a Laura Matamoros saltar desde el helicóptero entre lágrimas. Ésta última, dedicándole el salto a Makoke y haciéndola llorar.
Sin embargo, no todo ha sido glamour y celebración. Los problemas de salud han hecho acto de presencia, poniendo a prueba la resistencia de los participantes. Zayra, con problemas en el nervio ciático, tuvo que ser evacuada antes de una prueba crucial. La preocupación por su bienestar se reflejó en las palabras de sus compañeros y en la rápida respuesta del equipo médico. Equipo que la atendió en la misma playa.
Carmen Borrego también sufrió un revés al desmayarse debido al calor, la humedad y el hambre, y diciéndose así mima que era la “yaya” de la edición. También tuvo que ser tratada por el equipo médico y no tardó en recuperarse.
Cambios en los nominados
Entre las sombras, destacaba Aurah, que sorprendió gratamente a todos con su actuación en una prueba, además saliendo beneficiada por el público al ser salvada de la nominación.
La expulsión ahora sobrevuela las cabezas de Ángel Cristo Jr, Arantxa del Sol y Lorena, cuyo destino será decidido en la próxima gala. Sin embargo, el verdadero drama se desató entre Ángel y su ya declarada archienemiga. Carmen Borrego y Ángel se vieron las caras en el primer «Puente de la concordia» de la temporada. Aunque ambos aceptaron la oportunidad de reconciliarse, el resultado fue una brecha aún mayor entre ellos.
Los roces y las disputas no son nuevos en esta competición, y desde la pre-convivencia, las tensiones entre algunos concursantes, como Ángel y Carmen, han sido evidentes. Todo a causa de un comentario de Ángel Cristo llamando a Kike Calleja “cuidador geriátrico”.
Supervivientes sigue consiguiendo mantener a los espectadores al borde del infarto
La audiencia una vez más ha abrazado al formato con gusto, y se ha mostrado encantado con la vuelta de Jorge Javier. Ese cariño del público se ha visto recalcado en las cuotas de audiencia, con 5.3 puntos sobre la competencia y firmando un 16,8. Además mantuvo a 1.232.000 espectadores y consiguió una fidelidad del 38,2% para sus 172 minutos de duración. Rozando el 18,4 de 25 a 44 años.